El Estado reduce su déficit hasta el 1,14% del PIB en el primer semestre

El déficit del Estado es 0,79 puntos porcentuales de Producto Interior Bruto (PIB) inferior al registrado en el mes de junio del año anterior, con una reducción interanual del 38,4%.

El Ministerio de Hacienda y Función Pública ha publicado en su web los datos de déficit del Estado del mes de junio, así como el déficit conjunto de la Administración Central, Comunidades Autónomas y Seguridad Social correspondiente al mes de mayo en términos de contabilidad nacional.

Déficit del Estado (junio)

En el periodo enero-junio, el Estado ha registrado un déficit de 13.252 millones, un 38,4% menos que en el primer semestre de 2016. En términos de PIB, el déficit del Estado fue equivalente al 1,14%, 0,79 puntos porcentuales menos que el mismo periodo de 2016.

Si se excluyen los intereses devengados, el Estado obtiene un superávit primario de 114 millones frente a un saldo primario negativo de 7.488 millones en el primer semestre de 2016.

Recursos no financieros del Estado

En el primer semestre, los recursos no financieros del Estado han ascendido a 84.295 millones, frente a los 80.019 millones registrados en el mismo periodo de 2016.

Los ingresos por impuestos y cotizaciones ascienden a 78.035 millones de los cuales, 24.232 millones corresponden a impuestos corrientes sobre la renta y el patrimonio y 49.924 millones a impuestos sobre la producción y las importaciones, que crecen un 5,7% debido fundamentalmente a la evolución de los ingresos por IVA que aumenta un 6,6% respecto primer semestre de 2016.

En cuanto al resto de recursos, cabe destacar, los intereses que aumentan un 5,7 %. En sentido contrario los dividendos y otras rentas disminuyen un 12,7% por la caída de los beneficios del Banco de España en 519 millones, lo que se ha compensado parcialmente con los dividendos de ENAIRE que ascienden a 292 millones, sin correspondencia en 2016.

Empleos no financieros del Estado

Hasta el mes de junio de 2017 los gastos no financieros del Estado han sido de 97.547 millones, un 3,9% inferior a la registrada en el mismo periodo de 2016.

Las transferencias corrientes y de capital entre Administraciones Públicas, que son las partidas de mayor volumen (un 56,2% del gasto del Estado), alcanzan los 54.813 millones, con un descenso del 4,4%.

Este descenso se explica por las menores transferencias realizadas al Servicio Público de Empleo Estatal para financiar las prestaciones por desempleo en 1.514 millones, así como por las menores transferencias a las CCAA que caen un 1,2%, al igual que las transferencias a los Organismos de la Administración Central que caen un 14%.

Desciende también el gasto en consumos intermedios, en un 7%, así como la remuneración de asalariados en un 5,4% y los intereses devengados, un 4,6%. Otras de las partidas que disminuyen son la cooperación internacional corriente y la aportación a la UE que caen un 14,7% y un 12% respectivamente.

Entre las partidas de gasto corriente que aumentan cabe señalar las prestaciones sociales distintas de las transferencias en especie que aumentan un 1,6%, como consecuencia del crecimiento de las pensiones de clases pasivas, con un avance del 3,9% respecto al mismo periodo de 2016. También aumenta el resto de empleos corrientes en un 30,9%, debido casi en su totalidad al aumento en 533 millones respecto a 2016 del gasto destinado a la cobertura del déficit eléctrico, que se financia con el aumento de impuestos afectados a la financiación del déficit eléctrico.

Dentro de los empleos de capital, destaca la ayuda a la inversión, que ha aumentado un 26,6% debido a las aportaciones al ADIF-Alta Velocidad por importe de 187 millones, sin correspondencia en 2016. Por su parte, la formación bruta, alcanzando 2.129 millones, un 2,5% menos que en 2016.