La conciliación es un tema de máxima actualidad hoy en día. Son muchas las empresas que están apostando por incentivar este tipo de políticas, aunque a día de hoy es un tema que genera un gran interés entre los trabajadores, empresas y sociedad en general.
Por estos motivos, desde el Periódico del Talento hemos querido pulsar las opiniones de algunos de los principales directivos de empresas representativas.
- La primera pregunta que les lanzamos a nuestros entrevistados fue: ¿Qué valoración hace de la propuesta de conciliación laboral planteada recientemente por el Gobierno?
Manuel Alsa, director de Marketing y Comunicación de Edenred, comentó: Sin duda, creemos que es una propuesta necesaria y que demanda de forma evidente la sociedad. De hecho, el poder conciliar la vida laboral y personal ya se posicionaba como la principal preocupación de los trabajadores españoles en el Barómetro Bienestar y Motivación de los Empleados en Europa 2015, realizado por Edenred e Ipsos.
Concretamente, el 48% de los directivos de nuestro país afirmaba en dicha encuesta que el tiempo dedicado al trabajo era su mayor insatisfacción en su faceta profesional y que, a la hora de pedir un nuevo trabajo, el 91% consideraba que la conciliación de la vida personal y laboral sería una de las condiciones más importantes que valoraría para un nuevo puesto.
Un panorama preocupante que, además, cobra fuerza si comparamos la situación de los trabajadores españoles con la de países vecinos como Italia, donde la jornada laboral acaba a las 18 horas (al igual que lo propuesto ahora en España) o más aún si la comparativa la hacemos con Alemania o Suecia, con jornadas laborales que finalizan, como media, no más tarde de las 17 horas.
Por todo ello, creemos que es una medida necesaria que no sólo está demandando la propia sociedad sino que redundaría en un beneficio tanto para empleados como empresas. De hecho, un estudio de la escuela de negocios IESE Business School apunta que reducir la jornada laboral ofrecería un aumento del 19,2% en la productividad de los trabajadores españoles.
Ignacio Samaniego, responsable de Desarrollo de Personas y Capital Humano de Grupo Atisa destacó: Siempre que se crea un debate y se buscan grandes pactos es algo muy positivo que debe ser bien recibido, y que supone además una interacción muy necesaria por todos los agentes sociales.
Sin embargo, yo soy de los que pone el acento en la parte personal de la conciliación, antes que la familiar, partiendo de que cubre ambas según cada persona, por lo que me lleva a creer que antes que establecer limitaciones a los horarios se debe profundizar en la flexibilidad horaria y hondar adecuadamente en la posibilidad a estas soluciones que ofrece el teletrabajo, lo que creo permitirá una mayor adecuación a las necesidades de cualquier empleado.
Lo sano del debate es que no podemos escapar a su dificultad, dado el gran peso que tiene el sector servicios en nuestro país, lo que va a suponer un gran reto para este tipo de medidas y planteamientos.
Luis Pérez, director de Relaciones Institucionales de Randstad indicó: La limitación horaria de la actividad de las empresas es negativa para nuestra economía. El problema de la conciliación en España no viene dado tanto por el horario de los trabajadores, sino por la calidad del empleo. La incapacidad para conciliar la vida personal y profesional puede deberse al uso fraudulento de horas extraordinarias, donde se extiende la jornada más allá de lo acordado previamente entre las partes. Las medidas que se impulsen desde el gobierno deben buscar la lucha contra esta práctica que daña la calidad del trabajo y que no siempre genera el aumento de la productividad. Actualmente, muchos trabajadores están dispuestos a racionalizar sus horarios, es decir, realizar jornadas variables según la misma, como realizar más horas a cambio de trabajar menos días. La solución no se encuentra en limitar el horario de las empresas, sino en dar más facilidades a los trabajadores de las mismas.
Nacho Gimeno, Director Comercial de Up SPAIN subrayó: Es un paso hacia la equiparación del uso horario con nuestros vecinos europeos, pero se queda corta frente a las exigencias de los nuevos profesionales que piden una verdadera conciliación y una flexibilización real.
Thiago Pessoa, Country Manager Iberia de Gympass reseñó: Siempre que se reclame un plan que favorezca el trato efectivo e igualitario en ambos géneros, debería de ser apoyado por todos. Creo que es importante invertir en todo lo referente a la ordenación del tiempo de trabajo y flexibilidad de horarios, así como la puesta en marcha de campañas que muestren los beneficios de la conciliación y un reparto de tareas justo y responsable.
- La segunda cuestión que pusimos sobre la mesa desde el Periódico del Talento fue: ¿Cree que las empresas están apostando de forma decidida por fomentar estas políticas de conciliación?
Nacho Gimeno (Up-SPAIN): Depende del sector y de la capacidad de liderazgo de sus responsables de equipo. Cambiar las rutinas corporativas es difícil y lento, pero también es verdad que las organizaciones tienen claro que sólo podrán avanzar y seguir creciendo al ritmo de las tendencias laborales. Y la conciliación es una obligación. Estas medidas deben ser impulsadas desde los puestos de más responsabilidad de las compañías, sino no tendrán efecto.
Ignacio Samaniego (Grupo Atisa): La respuesta más justa sería un no, si partimos tanto de pequeños empresarios como de grandes, aún estamos en un momento muy tibio frente a la conciliación. Eso sí, no podemos dejar escapar que algo está pasando, la palabra conciliación empieza a usarse y acciones y comunicaciones como las de la Ministra Bañez lo reflejan.
Desde luego aunque no sea una realidad parece que la conciliación es uno de los grandes retos para aquellos que dirigimos la estrategia de personas y que va a suponer nuestro mayor objetivo de innovación para adecuarnos, más aún porque tenemos que tener la mirada clara en esa nueva generación de trabajadores que está llegando y que sabemos tienen otro concepto del trabajo dónde será primordial en sus valores la capacidad de conciliación.
Insisto en que la lentitud de adentrar a España en esas medidas viene muy determinado por el predominio del sector servicios y somos un país de sol por lo que nuestro concepto de día como consumidores también se ve afectado, aquí es dónde está nuestro gran reto.
Luis Pérez (Randstad): Según el informe de Tendencias de RRHH realizado por Randstad Research, la flexibilidad horaria es el factor más efectivo para las empresas para fidelizar el talento, así lo afirman el 69% de las compañías consultadas. Sin embargo, solo lo ofrecen el 53% de las mismas, con lo que existe un amplio recorrido que puede realizarse en este sentido.
Manuel Alsa (Edenred): Bueno, hay de todo… Es cierto que cada vez son más las empresas que empiezan a adoptar medidas que permitan una mayor conciliación para sus empleados, apostando por medidas como el teletrabajo. Pero también es cierto que queda un largo camino por recorrer… Criterios sobre todo culturales hacen que esta adopción sea algo más lenta de lo que querríamos pero es una tendencia ineludible en la que incluso el Gobierno parece que podría intervenir de forma activa… Así que, creemos que será algo que llegará sí o sí.
Thiago Pessoa (Gympass): Sí, y de hecho, es una tendencia que se está desarrollando no sólo en España, sino a nivel mundial. Las multinacionales están en la «obligación» de apostar por estas políticas de conciliación ya que está demostrado que aumentan notablemente la productividad de sus trabajadores.
- La tercera pregunta que lanzamos fue: ¿Cree que las políticas de conciliación laboral son beneficiosas para la productividad? ¿Cómo pueden incentivarlas?
Nacho Gimeno (Up-SPAIN): Creo que el trabajo por objetivos y un verdadero conocimiento del equipo de trabajo son las bases sobre las que se asienta la productividad. Los buenos líderes saben cómo trabajan sus colaboradores y cómo motivarles e implicarles en los proyectos. Y la mejor fórmula para motivar al equipo es ofrecer la posibilidad de conciliar la vida personal con la profesional. No hay que olvidar que las empresas son las personas que las componen.
Para incentivar el desarrollo de políticas de conciliación que funcionen, las empresas deben comprender que sólo con equipos motivados lograrán mantenerse fuerte en el mercado, y que no se rinde más porque se pasen más horas en la oficina sino porque se cumplan las objetivos en el plazo marcado.
Ignacio Samaniego (Grupo Atisa): Seguramente en pocas cosas coincidimos en el campo de la gestión de personas, pero que la conciliación es proporcional a la productividad es una de ellas, sin lugar a dudas la conciliación personal y laboral trae el éxito a la producción, no sólo de forma directa puesto que se asume una corresponsabilidad por el empleado en la gestión de sus funciones, también por aquellas indirectas sobre la reducción de absentismo, retención del talento, mejora del clima laboral, compromiso con los objetivos y organización, en definitiva trae un gran abanico de soluciones que a la larga salen más baratas que un empleado descontento. Hay diversas líneas de trabajo que pueden plantearse, pero quizás el primer matiz en el que yo pondría la mirada es involucrar realmente al gobierno, dado que hasta ahora parece que la conciliación debe ser un reto único y subvencionado por el empresario, cargando sobre él todas las dificultades, y debería existir una política motivadora e incentivadora para este tipo de retos que hasta ahora no hemos podido ver claramente.
Cómo líneas en las organizaciones podemos tener, horarios flexibles, jornadas continuas, turnos fijos, teletrabajo, bancos o bolsas de tiempos, servicios sociales incluidos en la empresa tanto de gestión directa o con empresas facilitadoras, y aquellas que están por llegar que nacerán seguro de la exigencia de la gestión de personas en cada sector.
Luis Pérez (Randstad): Las políticas de conciliación ayudan a mejorar la productividad. Es cierto que, dependiendo del sector de actividad, podremos hablar de una mayor o menor implantación, pero lo que sí está claro es que, en aquellos lugares donde existe conciliación, el trabajador se siente más cómodo y ayuda a que el rendimiento del mismo sea superior.
La forma de incentivarla viene relacionada a lo mencionado anteriormente, la solución no se encuentra en limitar los horarios, sino en la no sujeción a los mismos.
De esta forma, la empresa podrá operar, por ejemplo, por objetivos y así conseguir mayor eficiencia en el trabajo, ya que el empleado no perderá el tiempo. Es decir, la idea sería partir de la programación de metas, donde los trabajadores cumplen con ellas, teniendo la posibilidad de acabar con su jornada en cuanto finalicen las mismas: no hay un horario fijo, sino flexible. Además de ser eficaz para la empresa, supone un incentivo para los trabajadores.
Esto tendría que ir acompañado de un control para evitar el abuso o el fraude.
Manuel Asla (Edenred): Como señalaba anteriormente, las políticas de conciliación laboral no encierran sino beneficios para todos y en ese “todos” están incluidas las empresas que podrían aumentar la productividad de sus empleados y, con ello, su propia productividad y rentabilidad de negocio.
¿Políticas para incentivarla? Pues desde medidas de deslocalización como el teletrabajo a jornadas laborales flexibles o, por qué no, soluciones que ayuden al empleado a cuidar a su familia.
Una opción es ofrecer recursos (información y facilidades de contratación) sobre guarderías, por ejemplo.
Thiago Pessoa (Gympass): Sin lugar a dudas son muy beneficiosas. De hecho, las propias empresas son las primeras en percibir el cambio ya que sus empleados están mucho más comprometidos con sus tareas en la compañía.
Desde Gympass estamos viendo cambios importantes dentro de las empresas con la implantación de programas de salud, ya que mejoran considerablemente la productividad de sus empleados. Por ello, ofrecemos acceso ilimitado a las compañías que utilicen nuestra plataforma, donde los empleados pueden acceder a más de 1.400 gimnasios por toda España.
En resumen, desde el Periódico del Talento hemos analizado los diversos puntos de vista en un tema con tanta trascendencia como el de la Conciliación.
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