La contribución que recibe la ONG Aldeas Infantiles SOS Internacional por parte de cada donante se multiplica por cuatro en bienestar en la vida de los niños, jóvenes y familias vulnerables, atendiendo así, a una proporción de más de 4 euros por cada uno invertido, según un análisis realizado por expertos de la ONG y de Boston Consulting Group.
Así, para desarrollar este sistema de medida, ambas entidades han entrevistado en dos países africanos a cientos de personas que han pasado por sus programas y ha analizado ocho dimensiones de su situación: alojamiento, protección, alimentación, cuidado personal, salud, medios de vida, educación y habilidades, bienestar social y emocional.
Este análisis económico evalúa dos elementos de los programas que la organización desarrolla: el impacto financiero sobre los participantes individuales del programa (en cuanto a presente económico y horizonte financiero), y ese mismo impacto en la sociedad (beneficios financieros aportados a la comunidad más ahorro de costes del Gobierno al no tener que proporcionar servicios sociales a las personas que han logrado ser autosuficientes). Además, señala que hay que considerar los beneficios a largo plazo que se producen al romper el ciclo de pobreza o exclusión social, atendiendo a los ingresos económicos de la próxima generación.
Según han apuntado desde BCG, «las empresas tienden a medir fácilmente el rendimiento a largo plazo utilizando un número determinado de indicadores, incluyendo, comúnmente, el retorno de la inversión. Para las organizaciones no lucrativas, por el contrario, no existen baremos estándar, y los resultados a largo plazo son mucho más difíciles de evaluar».
Sin embargo, han añadido que «una comprensión exacta del impacto que reciben a largo plazo se está convirtiendo en algo cada vez más importante en este campo. Los donantes, en busca de una mayor transparencia, quieren saber con precisión cómo sus contribuciones están marcando una diferencia».
La ONG trabaja en 134 países atendiendo a los niños, jóvenes y familias en situación vulnerable y en el mundo ha apoyado a 439.500 personas en 2015 a través de los programas de fortalecimiento familiar; cuidado a 78.000 niños en Familias SOS; formado a 206.100 niños y jóvenes en escuelas infantiles, cursos de formación y centros sociales; proporcionado 845.200 servicios de salud individuales y 789.500 atenciones de emergencia.
Todavía no hay comentarios en "Crece el impacto social en las donanciones a las ONG's"