800 adolescentes de Reus renuevan su visión de la discapacidad a través del testimonio de Joan Pahísa

La Fundación Adecco, la empresa Altrad Rodisola y el Ayuntamiento de Reus han finalizado hoy el ciclo de jornadas Altrad Rodisola Ability School Day, mediante el que alumnos de 2º de la ESO de 8 institutos de Reus (INS Vilaseca, INS Domenech, INS Gaudi, College Francais, La Salle, INS Gabriel Ferrater I Sole, INS Escola Pi del Burgar e INS Baix Camp), han podido escuchar de primera mano el testimonio de Joan Pahísa, informático y deportista de alto nivel de apenas un metro de estatura. La última jornada ha tenido lugar en el Collège Français. El objetivo, una vez más, ha sido superar barreras y eliminar estereotipos sociales que estigmatizan a las personas con discapacidad.

Así, a través de su propia experiencia personal, Pahisa ha ofrecido una visión renovada de la discapacidad, instando a los jóvenes a “poner la mente en blanco para eliminar todo prejuicio y poder ver a la persona por encima de cualquier discapacidad”. En esta línea, Pahísa, de 30 años, ha insistido en la necesidad de normalizar la discapacidad en pleno siglo XXI, pues sólo es una característica más de la persona y no determina el talento ni los valores. “Siempre digo que todas las personas, independientemente de cómo seamos, tenemos el mismo reto: aceptarnos tal como somos. La adolescencia es una época de muchos miedos e inseguridades y yo pasé momentos complicados, pero con el tiempo me he dado cuenta de que no tenían nada que ver con mi estatura, sino con mis propios temores. Una vez te aceptas a ti mismo y te abres a los demás, los obstáculos se reducen y nadie puede hacerte daño. Yo no destaco por una superación extraordinaria: todo lo que he hecho es enfrentarme a mis miedos”.- ha señalado.

Además del testimonio de Joan, los escolares han podido disfrutar de actividades que relacionan la discapacidad con la fotografía y el cine. Según Montse Masip, gestora de proyectos de la Fundación Adecco en Tarragona: “la iniciativa Ability Week, con las distintas actividades que la integran, es la mejor manera de llegar a los adolescentes y hacerles ver que las personas con discapacidad pueden llevar a cabo todos los proyectos personales y profesionales que se propongan. Con este tipo de actividades conseguimos normalizar la discapacidad y que los adolescentes entiendan el valor que tiene la diversidad en las personas”.

Por su parte, Miquel Bella, director general de Altrad Rodisola ha asegurado que: “esta iniciativa pretende que valores como el esfuerzo, el sacrificio, la superación y la igualdad calen entre los adolescentes y logremos una sociedad y un futuro mercado laboral más ecuánime e integrador, donde no haya lugar a la discriminación”.