Save the Children e IKEA Ibérica inician un proyecto de colaboración por el que niños, niñas y jóvenes en situación de pobreza y/o riesgo de exclusión de Madrid y derivados desde servicios sociales, de educación o de salud, podrán disponer de nuevos espacios educativos y de tiempo libre tras la jornada escolar.
Así, Save the Children, en colaboración con Redes Sociedad Cooperativa, pone hoy en marcha un nuevo centro social educativo en el distrito de Carabanchel, más concretamente en la zona de Pan Bendito, cuyos espacios han sido diseñados y acondicionados por IKEA, gracias al voluntariado prestado por 25 empleados de sus oficinas centrales de San Sebastián de los Reyes y de sus tiendas en Madrid (Alcorcón, San Sebastián de los Reyes y Vallecas) junto con socios IKEA Familly y seis voluntarios de Save the Children.
El proyecto pone a disposición de niños, niñas y jóvenes de entre 3 y 16 años de la zona un espacio seguro de ocio y tiempo libre educativo como una vía para favorecer el desarrollo, descanso y diversión de la infancia y adolescencia más vulnerable de la zona.
Este nuevo centro estará abierto de lunes a viernes en horario de 16 a 20 horas y en él, 15 voluntarios atenderán hasta a 75 usuarios semanalmente. Implementado en un local de cerca de 150 m2, se han equipado un vestíbulo, una ludoteca, tres talleres, una biblioteca/sala de estudio e informática, un despacho, dos aseos y una cocina, con una inversión total de equipamiento de 9.500 euros por parte de IKEA.
En estos espacios, Save the Children continuará desarrollando su Programa de Lucha contra la Pobreza Infantil en España, ya iniciado en otros centros en España, por el que se acompaña a niños, niñas y adolescentes tras la jornada escolar como refuerzo educativo y se les ofrece un espacio de tiempo libre. El programa cuenta con más de 5.000 niños en riesgo de pobreza y exclusión beneficiados.
El apoyo de IKEA a la infancia queda recogido en su programa El Poder de la Infancia, que refleja el compromiso de IKEA para respetar, proteger y promocionar sus derechos a lo largo de toda su cadena de valor -desde la tolerancia cero al trabajo infantil hasta el desarrollo de productos, servicios y experiencia de compra enfocados para familias con niños y niñas-, así como la capacidad que tienen para transformar la toma de decisiones en la compañía.
En una segunda fase de esta colaboración se prevé también el acondicionamiento de espacios de este tipo en colegios de Fuencarral y Vallecas.
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