En la investigación, realizada por la consultora independiente Millward Brown, han participado 1385 directivos españoles de empresas exportadoras. El informe indica que los sectores que registran mayor crecimiento como consecuencia de su apuesta internacional son el de infraestructuras (74%), ingenierías (59%) y bienes de equipo y tecnología (54%).
El tamaño es una característica que influye en este proceso pero no es la única. Durante estos años, se ha demostrado que la gestión del equipo y una buena relación calidad-precio son claves. Por otra parte, las regulaciones en el país de destino y la financiación son los principales obstáculos para el éxito.
Actualmente, un 35% de las empresas consultadas sí tiene un plan de internacionalización aunque reconoce que aún no se han concretado las líneas de acción. No hacerlo puede repercutir en los resultados. Precisamente, los beneficios son mayores cuando se implementa un cambio integral en el modelo de negocio.
En las últimas décadas, el tejido empresarial español ha vivido una transformación. Los mercados exteriores mantienen el negocio activo y abren nuevas oportunidades. Además, son la mejor escuela para mejorar la eficiencia y adquirir experiencia. Ahora, el principal reto al que se enfrentan las compañías es afianzar esta tendencia.
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